Alemania detuvo hoy miércoles a 25 integrantes y simpatizantes de un grupo de extrema derecha que, según la fiscalía que ordenó el operativo, estaba preparando un derrocamiento violento de las autoridades actuales del Estado.Los fiscales dijeron que el grupo se inspiraba en las teorías conspirativas del Estado profundo de QAnon y los Reichsbuerger, que no reconocen la legitimidad de la Alemania moderna, insistiendo en que el ‘Deutsche Reich‘, mucho más amplio, seguía existiendo a pesar de la derrota de los nazis en la Segunda Guerra Mundial.El complot preveía que un antiguo miembro de la familia real alemana, identificado como Heinrich XIII P.R. en virtud de la ley de privacidad alemana, fuera el líder de un futuro Estado, mientras que otro sospechoso, Ruediger v.P., era el jefe del brazo militar, según la fiscalía.Heinrich, que usa el título de príncipe y procede de la Casa Real de Reuss, que había gobernado partes de Alemania oriental, se había puesto en contacto con representantes de Rusia, a quien el grupo consideraba su contacto central para establecer su nuevo orden. No hay pruebas de que los representantes hayan reaccionado de forma positiva a la petición. La embajada rusa en Alemania fue citada por la agencia de noticias RIA diciendo que las instituciones diplomáticas y consulares rusas en Alemania no mantienen contactos con representantes de grupos terroristas y otros grupos ilegales. LA REACCION OFICIALLa ministra alemana del Interior, Nancy Faeser, declaró que el gobierno responderá con todo el peso de la ley contra tales intentos de atentar contra el Estado y afirmó que las investigaciones posteriores revelarán hasta qué punto habían avanzado los planes golpistas del grupo.‘Las investigaciones permiten vislumbrar el abismo de una amenaza terrorista del entorno de los Reichsbuerger‘, dijo Faeser en un comunicado, añadiendo que el Estado constitucional sabe cómo defenderse de ‘los enemigos de la democracia‘.Un soldado en activo y varios reservistas se encontraban también entre los investigados, según declaró a Reuters un portavoz del servicio de inteligencia militar. El soldado en activo es miembro de la fuerza de élite KSK de la Bundeswehr, que ha sido investigada en los últimos años debido a una serie de incidentes de extrema derecha.Los investigadores sospechan que algunos miembros del grupo tenían planes concretos para asaltar la Cámara Baja del Bundestag en Berlín con un pequeño grupo armado, según la fiscalía.La agencia de inteligencia nacional de Alemania estima que unas 21.000 personas pertenecen al movimiento Reichsbuerger (Ciudadanos del Reich), de las que alrededor del 5% se consideran de extrema derecha. Unos 2.100 de ellos están dispuestos a utilizar la violencia para alcanzar sus objetivos, según el informe del año pasado de la agencia.